El que es perico donde quiera es verde.

Esto es una pequeña experiencia de ayer. Me ha pasado mucha veces pero quizás ahora que empecé con el blog es que se me ocurrió escribirlo...

"El que es perico donde quiera es verde", hace alusión a que la persona es lo mismo en todos lados, por ejemplo: Que si no le gusta trabajar, no importa qué trabajo le pongan, no trabajará. En la parte buena todos deberíamos ser "verdes" donde quiera, o sea que si somos buenas personas, eso no sea solo con nuestros amigos sino también con nuestra familia; o pasaría a ser el otro refrán: "Candil de la calle, oscuridad de su casa".

Haré una modificación a ese refrán a lo sud: El que es perico mormón donde quiera es verde mormón.

La pequeña experiencia fue: 

Ayer me subí a una camioneta, ya para regresar a casa después de un viaje. Encontré un asiento vacío, y acomodé mi mochila en la paquetera de la camioneta. Al estar acomodando mi mochila, veo que la señora de adelante está leyendo un libro y marcando en él. Me fijé un poquito más y me di cuenta que yo sabía cuál era ese libro, de hecho reconocí la página que ella estaba leyendo porque yo había leído en mi libro en esa misma página unos tres días antes.

Sabiendo que ambos estábamos leyendo el mismo libro, quise hablarle, al mismo tiempo que pensé: ¿Me corresponderá la plática?... Decidí hablarle.

¿Leyendo la clase para este domingo?, le pregunté. "Sí, mire. Siempre me gusta andar algo para leer", me dijo. Empezamos a hablar de lo bonito que estaba ese capítulo del libro, que sería la clase del próximo domingo en la Iglesia; nos dijimos de dónde somos, hablamos sobre nuestras familias, comentó sobre sus hijos que fueron a la misión y sobre su hija que está sirviendo aún. 

Sí, ella era miembro de la Iglesia.

Y eso es lo que me gusta de la Iglesia, que al tener eso en común con otras personas, podemos saber que no somos completos desconocidos el uno para el otro, sino hermanos que aún no han cruzado palabra.

Eso... Eso que me gusta tanto de la Iglesia... No importa si no nos habíamos visto antes, el tener eso en común nos hace hermanos. Aún cuando  yo voy de viaje y es domingo, siempre busco la Iglesia para asistir, y siempre sé cómo son las reuniones, hasta puedo saber qué tema toca en las clases. Me encanta ese orden. 

El punto es que en cualquier lado se debe reflejar que somos santos de los últimos días (mormones), no necesariamente por andar libros de la Iglesia, sino que siempre se vea por nuestro comportamiento y lenguaje. Que podamos tener ese amor que como hermanos debemos tener. Que no porque no nos hemos cruzado antes no pensemos y recordemos que somos hermanos. 

No seamos candil de la calle, oscuridad de la casa; seamos siempre unas buenas personas, la clase de personas que se nos enseña ser.

Pues, si soy un perico mormón debo siempre ser verde mormón en cualquier lugar, tiempo y con cualquier persona.